El mar es el futuro

La bióloga chileno-alemana Verena Häussermann y el científico Josep-Maria Gili debaten sobre la importancia de proteger el fondo marino

El tercer debate del ciclo Científicas por el medio ambiente, organizado por Casa Amèrica Catalunya con la colaboración de DIPLOCAT, ha tratado sobre la importancia del mar para el ecosistema. El ciclo incluye una serie de debates con mirada de mujer sobre las grandes cuestiones que en el futuro serán ejes de investigación científica para la preservación del planeta y de nuestras vidas, durante el cual destacadas científicas de Latinoamérica debaten con divulgadores catalanes cuestiones como la pandemia, el clima, el agua, la biodiversidad o la montaña.

En esta tercera sesión, la bióloga chilena-alemana Verena Häussermann, investigadora asociada de la Universidad Católica de Valparaíso, y Josep-Maria Gili, catedrático investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona, han debatido sobre el fondo marino. Gili ha iniciado la conversación preguntado por la relación particular de Häussermann con la Patagonia chilena. La científica ha comentado la sorpresa que para ella supuso observar la biodiversidad de las aguas de los fiordos chilenos y el hallazgo de grandes colonias de corales en aguas tan frías, un descubrimiento que tan solo ha empezado porqué que las dimensiones y la variedad del terreno vislumbran aún muchas y nuevas sorpresas. En este sentido, Gili ha remarcado que los corales de aguas frías son uno de los objetivos más importantes de la investigación biológica actual.

Por su lado, Häussermann ha señalado que en los últimos diez años se ha notado mucho la incidencia de la agricultura, la actividad humana y el cambio climático en las colonias de corales y que en zonas que antes estaban llenas actualmente han desaparecido la mayor parte de los ejemplares. Otro de los efectos negativos se debe a la actividad de la misma naturaleza, como por ejemplo la actividad volcánica, porque muchas plantas no toleran bien la falta de oxígeno y su desaparición altera toda la cadena vital. En este punto, Gili ha puesto sobre la mesa si no se utiliza demasiado la excusa del cambio climático para justificar estos cambios y al mismo tiempo se subestima el efecto nocivo de la actividad humana, señalando en conctero la pesca industrial excesiva y el uso de nutrientes para aumentar la producción. A juicio de Häussermann, el cambio es producto de múltiples factores y el cambio climático lo agrava.

Ambos han coincidido en resaltar la importancia de la conservación de la biodiversidad marina porque de ella depende la supervivencia del ecosistema. Häussermann ha hablado de los "animales bioingenieros", que dan refugio a otras especies, y por lo tanto aseguran su supervivencia. Así pues, con la destrucción de algunas especies, otros ocupan su lugar y ya no permiten la reproducción. Por ello "como más completo es el ecosistema, más estable y resistente se mantiene", ha dicho.

Llegados a este punto, ambos científicos han señalado la importancia de las llamadas "áreas marinas protegidas o reservas marinas", en las que se establecen diferentes niveles de protección y de actividades permitidas, pero no basta con la denominación, sino que debe haber también una actuación clara de vigilancia sobre estas.

"La protección del fondo marino pasa por un compromiso global de la sociedad, pero los científicos también deberíamos estar comprometidos con la sociedad y alertarla", ha dicho Gili. Por su parte, Häussermann ha insistido en que nos encontramos ante "una emergencia medioambiental, ya que perdemos una especie cada siete minutos" y es por ello que "tenemos que trabajar conjuntamente para preservar el mar, porque ocupa el 71% de la superficie del planeta" . "El mar es el futuro", ha subrayado.

A modo de conclusión, ambos ponentes han insistido en la importancia de la investigación y han evidenciado la paradoja de destinar tantos esfuerzos científicos y económicos en buscar vida en otros planetas, en lugar de destinarlos a conocer "por completo" la vida en el nuestro.

La jornada ha concluido con la proyección del cortometraje Regalos de plata, dirigido por Eddie Frost, sobre la investigación del fondo marino en la Patagonia chilena. El documental sigue a Verena Häussermann mientras explora los ricos ecosistemas y destaca los retos clave para la vida silvestre allí. La película hace un llamamiento para una mejor comprensión de la zona y para que se establezcan urgentemente áreas marinas protegidas en la zona. De lo contrario, estos "regalos de plata" se perderán para siempre.

Próximas charlas

El ciclo Científicas por el medio ambiente pone el foco en científicas que han brillado por su perseverancia y éxito en la defensa de algún ámbito de investigación de la Naturaleza. Son mujeres que se han convertido en un referente en su materia, que han creado escuela de trabajo o han hecho algún descubrimiento científico determinante, que han firmado en destacadas publicaciones científicas y han recibido premios internacionales.

En las próximas sesiones del ciclo participarán: Claudia Suseth-Romero, guatemalteca inventora de un método natural de descontaminación del agua; Tatiana Espinosa, ganadora del Jane Goodall Hope and Inspiration Ranger Award por su labor en la Amazonía; Brigitte Baptiste, directora del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt en Colombia durante ocho años; y Yolanda Kakabadse, impulsora de la Declaración para la Sostenibilidad Medioambiental en Latinoamérica. Les acompañarán los divulgadores científicos catalanes Ramon Folch, Alex Richter-Boix, David Bueno y Vladimir de Semir.