La formación profesional, instrumento estratégico de país

Hoy se ha celebrado en Barcelona el II Congreso de la FP en Cataluña, coorganizado por PIMEC y DIPLOCAT

El Palacio de Pedralbes de Barcelona ha acogido hoy, miércoles 1 de junio, el II Congreso de la Formación Profesional (FP) en Cataluña, organizado por PIMEC y con la coorganización de DIPLOCAT. La primera edición del congreso tuvo lugar con gran éxito en noviembre de 2019.

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, ha inaugurado el congreso y ha subrayado que para el gobierno catalán "esta es y debe ser la legislatura de la FP", que hay que ponerla en valor y que sea "una primera opción igual de válida" que el resto de opciones formativas. Aragonès ha destacado que el gobierno está creando más plazas y nuevos ciclos formativos de FP, invirtiendo más recursos y apostando por la formación dual, "pero, sobre todo lo estamos reforzando con una apuesta inequívoca por el diálogo y la concertación con los agentes sociales, porque es evidente que ese salto adelante nos implica a todos y todas".

El presidente de PIMEC, Antoni Cañete, ha defendido el sistema de gobernanza de la FP en Cataluña, mediante la Comisión Rectora que debe permitir grandes consensos para acabar con las carencias de este sistema formativo, como es el hecho de que las empresas no encuentren perfiles profesionales para determinados puestos de trabajo. Por su parte, la ministra española de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, se ha conectado desde Madrid y ha expuesto los buenos resultados conseguidos por la formación profesional en términos de empleabilidad, pero también ha reconocido que "queda mucho camino por recorrer".

A continuación ha comenzado el bloque internacional del congreso, coordinado por DIPLOCAT y presentado por su secretaria general, Laura Foraster i Lloret, que ha subrayado la importancia de mirar más allà de las fronteras a la hora de debatir los grandes temas de país, como lo es la FP, y aprender de aquellos que van más avanzados. Foraster ha recordado que el diálogo internacional es uno de los distintivos de la entidad.

Foraster ha cedido la palabra a Ramona David, coordinadora del Área de Aprendizaje y Empleo del Centro Europeo para el Desarrollo de la Formación Profesional (Cedefop). Ella ha sido la encargada de presentar las políticas que la UE está llevando a cabo para promover la FP y ha hablado sobre las cuatro prioridades para el período 2021-2025 recogidas en la Declaración de Osnabrück: conseguir una FP de calidad, inclusiva y flexible; fortalecer la cultura del aprendizaje a lo largo de toda la vida; incluir criterios medioambientales y de sostenibilidad; y crear un espacio europeo de FP.

Los siguientes en intervenir han sido la danesa Charlotte Romlund Hansen, asesora especial de la Sección de Educación y Formación Profesional y de Adultos del Ministerio de Educación e Infancia; y el irlandés Rory O'Sullivan, director del Killester and Marino College of Further Education. También estaba prevista la participación de una representante alemana, pero no fue posible por una cancelación a última hora por temas de salud.

La representante danesa ha dicho que los tres grandes retos de la FP en su país son la adaptación a la creciente digitalización e innovación; transmitir las aptitudes y conocimientos en materia de sostenibilidad que requiere el mercado laboral; y promover la educación de adultos y su reciclaje profesional continuado. Por su parte, el representante irlandés ha explicado que el modelo de su país se basa sobre todo en el aprendizaje de habilidades (skills) y en las estancias en empresas (traineeships). En este sentido, ha subrayado que a los dos espacios de aprendizaje clásicos, las aulas y los puestos de trabajo, hay que añadir desde hace unos años el aprendizaje online, y que sólo si los tres procesos están bien coordinados se puede conseguir un aprendizaje de calidad.

El resto de intervenciones del congreso han coincidido en considerar la formación profesional como una herramienta estratégica y de país, ideada para dar una respuesta flexible y de calidad a las necesidades formativas de personas y empresas, fomentando el empleo, la competitividad y la inclusión social. Entre sus objetivos debe estar el de hacer emerger el talento y la capacidad de asumir los retos del mercado de trabajo, favoreciendo así una economía de calidad y competitiva.

El congreso también es una invitación al consenso para un gran pacto social de la FP, que amplíe y despliegue aquellos elementos clave que actúan como palancas reales de progreso: la orientación, la prospección, la innovación y el trabajo en red. En el comité impulsor del congreso se encuentran PIMEC, Fomento del Trabajo Nacional, CCOO de Cataluña y UGT de Cataluña. Hoy se ha acordado que el encargado de organizar una próxima edición del congreso sea CCOO de Catalunya.