La guerra cambia la lucha por los derechos de los trabajadores

UGT de Cataluña y Cataluña Internacional invitan a los representantes de los principales sindicatos de Ucrania para hablar de su lucha en tiempo de guerra

Ayer por la tarde tuvo lugar en la Sala de Brigadas Internacionales de la sede de UGT de Cataluña la conferencia "Derechos laborales en tiempo de guerra: una lucha por las libertades y la democracia". La jornada fue organizada por UGT de Cataluña con la colaboración de Cataluña Internacional y contó con la participación de los representantes de los dos principales sindicatos de Ucrania, la Federación de Sindicatos de Ucrania (FPU) y la Confederación de Sindicatos Libres de Ucrania (KVPU).

El acto fue inaugurado por el secretario general de UGT de Cataluña, Camil Ros, quien en sus palabras de bienvenida remarcó que en situaciones de crisis como la que vive Ucrania hay que tratar de no perder la condición de personas humanas a pesar de que la lucha por los derechos se vea temporalmente afectada. A nivel institucional hablaron también Jordi Valls, cuarto teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, ​​Manuel Szapiro, director de la oficina de representación de la Comisión Europea en Barcelona y la secretaria general de Cataluña Internacional Laura Foraster i Lloret. Valls y Szapiro remarcaron la importancia de no olvidar el conflicto abierto en Ucrania a pesar de que haya pasado a un segundo plano en la agenda mediática, dado que en este conflicto está en juego la defensa de los valores inherentes a la Unión Europea y a Europa en general. Por su parte, Foraster destacó que el encuentro tenía por objetivo traer la voz de los protagonistas de este conflicto a Cataluña para poder oír de primera mano lo que está pasando en Ucrania. Foraster también recalcó que escuchar lo que ocurre en el ámbito internacional es un trabajo primordial de la entidad para conectar Cataluña con el resto del mundo y facilitar el intercambio de buenas prácticas en ambas direcciones.

La jornada fue conducida por Cati Llibre, responsable de Internacional en UGT de Cataluña, quien, una vez terminadas las presentaciones institucionales, interlocutó con los verdaderos protagonistas de la jornada, el presidente de la FPU, Grygorii Osovyi, el secretario de 'Internacional, Vasyl Andreryev, y la secretaria de Internacional de la KVPU, Olesia Briazgunova.

En su exposición, Osovyi señaló que la guerra ha cambiado los términos del diálogo sindical. No se puede hablar de falta de productividad porque la guerra ha destruido muchos puestos de trabajo y ha incrementado la crisis económica y social afectando a los derechos de los trabajadores por la aplicación de la ley marcial. La labor del sindicato, entre otros, se ha convertido también en definir una estrategia futura para la situación de posguerra.

Por su parte, Briazgunova se centró en hablar del riesgo que han tenido que asumir las mujeres, e incluso los niños, en el mercado laboral, para reemplazar el trabajo de los hombres llamados a filas. Trabajos en los que estaba prohibido por el gobierno contratar a mujeres o niños, como el trabajo en minas, ahora son ocupados por este sector para asegurar el día a día del país. O el estrés postraumático que están sufriendo como víctimas directas de la violencia producida por el conflicto. Ambas situaciones son claras muestras del cambio social y laboral que se ha producido en el país como consecuencia de la guerra. En este sentido, destacó los programas de resiliencia psicológica y ayuda psiquiátrica que están desarrollando los sindicatos. La ponente concluyó poniendo en evidencia que la guerra ha pospuesto las luchas clásicas sobre las brechas salariales y la igualdad de género para hacer frente a los problemas de riesgo y seguridad laboral y al incremento de enfermedades mentales surgidas a raíz del conflicto.

Finalmente, Andreyev habló del trabajo que habrá que realizar para gestionar el escenario de posguerra. Comentó que de los 10 millones de ucranianos que han huido del país dudan de que vuelva la mitad y eso abre nuevos retos para recuperar mano de obra, más necesaria que nunca, para ayudar a la reconstrucción del país. También habrá que formar trabajadores en los ámbitos de la construcción y la metalurgia y trabajar en la reinserción profesional de los veteranos. El ponente señaló que Ucrania deberá renovarse porque lleva muchos años siendo atacada, más allá del conflicto actual, y habrá que afrontar también las luchas clásicas de cualquier sociedad como la lucha contra la corrupción, el derecho a la huelga y la recuperación de libertades. En definitiva, se trata de recuperar la normalidad y proteger "la civilización europea", según sus palabras.

La jornada concluyó con las intervenciones de representantes de diferentes entidades de la sociedad civil catalana que se han implicado en el análisis o el apoyo directo al conflicto en Ucrania. Hablaron David Minoves, director del Fondo Catalán de Cooperación, Carmen Claudín, investigadora senior asociada del CIDOB, Alfons Bech, de la Red Europea de Solidaridad con Ucrania y Victoria Tissot, embajadora de las Artes de Ucrania.