La economía circular como respuesta a la crisis generada por la COVID-19

El segundo Diplocat Digital Talk se ha organizado conjuntamente con el Consejo Asesor para el Desarrollo Sostenible (CADS)

El 29 de junio, Diplocat ha organizado el segundo debate del ciclo Diplocat Digital Talks - El mundo tras la COVID-19, conjuntamente con el Consejo Asesor para el Desarrollo Sostenible (CADS) de la Generalitat de Catalunya. Los temas a tratar han sido el Plan de Acción para la Economía Circular de la Comisión Europea y las oportunidades que la crisis del COVID-19 ofrece para este tipo de economía. En el debate han participado un representante de la Asociación de las Empresas Industriales Internacionalizadas de Cataluña (AMEC), un representante del Programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas y una analista del Instituto for European Environmental Policies (IEEP).

En la presentación del acto, Laura Foraster i Lloret, Secretaria General de Diplocat, expuso el papel fundamental del Plan de Acción para la Economía Circular y recordó cómo, cuando se aprobó el Plan, nadie esperaba que tuviera el impacto que posiblemente tendrá en la recuperación económica tras la crisis del COVID.

Arnau Queralt-Bassa, Director del CADS y moderador del debate, expuso la relevancia de este debate en esta situación sin precedentes y el crecimiento de las desigualdades que se han creado, que deben resolverse de una manera sostenible.

Eloïse Bodin, analista política del Institute for European Environmental Policy (IEEPO), remarcó en su ponencia la importancia de hacer una transición verde basada en la equidad y la solidaridad, equilibrando las políticas que reducen las desigualdades económicas junto con las políticas que reducen la contaminación y el uso del carbono. Recordó la importancia que puede tener la transición para la creación de puestos de trabajo y el hecho de que las empresas sostenibles son las que tienen más posibilidades de sobrevivir a las crisis y readaptarse. En cuanto al coste de esta transición, desde IEEPO han visto que hay diferentes maneras en que se puede financiar, que van desde la eliminación de los dividendos de contaminación en la implementación de nuevos impuestos o la creación de incentivos. Finalmente, Bodin también expuso la necesidad de involucrar a los actores locales en esta transición, ya que constató que están más dispuestos que los estados a implementar estas nuevas medidas.

Diego Guri, Subdirector de la Asociación de las Empresas Industriales Internacionalizadas (AMEC), entidad miembro de Diplocat, expuso la visión empresarial sobre la transición verde. Explicó los cambios que la AMEC y sus empresas han hecho, tanto de acción como de modelo empresarial, lo que les ha llevado a repensar su misión para adaptarla a las necesidades de transición actuales. Expuso que el COVID ha supuesto una nueva oportunidad empresarial, donde muchos han decidido diversificar sus sectores, y también se han replanteado los usos de diferentes materiales. A partir de estos cambios se deben repensar los indicadores de sostenibilidad sobre los que se trabaja para fomentar el crecimiento colectivo por encima del crecimiento individual, teniendo en cuenta las necesidades particulares de Europa y de su modelo industrial y de competitividad, que considera que es diferente e incomparable con el asiático y el americano. Guri también remarcó la importancia de que las instituciones sean coherentes y que sus discursos, sus herramientas y mecanismos, y sus acciones vayan todas encaminadas hacia la misma dirección.

Llorenç Milà i Canals, Jefe del Secretariado de la Iniciativa del Ciclo de Vida del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, con sede en París, expuso la visión institucional de la ONU al respecto. Analizó diferentes iniciativas económicas que se están realizando para recuperar la economía en este momento y explicó que la mayoría no tienen una perspectiva sostenible, sino que de hecho invierten en sectores que son perjudiciales para el medio ambiente. Mostró diferentes indicadores que analizan las inversiones sostenibles y aseguró que hay muchas posibilidades de inversiones sostenibles y que lo que hay que hacer es identificarlas e invertir en estos sectores verdes que, por sí solos, debido al hecho de que todavía estamos en una sociedad basada en las energías fósiles, no tendrían las mismas oportunidades. Milà también dijo que, a parte de la sostenibilidad de las inversiones, se debe tener presente la sostenibilidad de la producción de los productos a lo largo de todo el proceso creativo y ha reconocido, como Bodin, que las empresas del futuro serán resilientes para poderse regenerar ante los cambios y poder ser más sostenibles y socialmente responsables.

En la clausura, los ponentes hablaron sobre el crecimiento económico y como este debe cambiar para poder ser sostenible. Sostuvieron que una de las principales cuestiones que se debe debe tener encuenta es redefinir crecimiento y éxito económico, y cambiar los indicadores económicos en que se basa la sociedad actual.